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Esta muestra reúne a dos fotógrafos chilenos que,
desde enfoques distintos, indagan en lo transitorio y lo desechado como formas de resignificación. Aguirre utiliza cianotipias para rescatar objetos comunes destinados al olvido, proponiendo una mirada poética y lenta frente a la velocidad tecnológica. Delpin, en cambio, trabaja con destellos solares y cuerpos indefinidos que evocan lo mítico y revelan claves actuales del deseo. Juntas, sus obras plantean una reflexión sobre lo pasajero y lo que persiste más allá de la desaparición.

EL PROYECTO PROPONE UNA REFLEXIÓN VISUAL Y POÉTICA SOBRE LOS
RESIDUOS COTIDIANOS Y SU VÍNCULO CON LOS MECANISMOS DE
PRODUCCIÓN CONTEMPORÁNEOS. MEDIANTE CIANOTIPIAS IMPRESAS AL
SOL CON MATERIALES ACCESIBLES, SE VISIBILIZAN OBJETOS DESECHADOS COMO RESTOS DE COMIDAS, COMPRAS DE SUPERMERCADO O EMPAQUES DE COMPRAS DIGITALES A DOMICILIO, REVELANDO SU CARGA SIMBÓLICA Y SU RELACIÓN CON EL SISTEMA DE CONSUMO ACTUAL. AL VOLVER A UNA TÉCNICA FOTOGRÁFICA ANALÓGICA, SE PLANTEA UN GESTO DE RESISTENCIA FRENTE A LA ACELERACIÓN DIGITAL Y SE INVITA A RECUPERAR EL CONTACTO FÍSICO CON LOS MATERIALES.

MÁS ALLÁ DE UNA CRÍTICA DIRECTA, LA OBRA ABRE UN ESPACIO DE
CONTEMPLACIÓN SOBRE LA ECONOMÍA DEL DESECHO Y LA ILUSIÓN DEL RECICLAJE. DESDE UN ENFOQUE ARTESANAL E ÍNTIMO, EL PROYECTO APUESTA POR LA SENSIBILIDAD DE LA SIMPLEZA COMO HERRAMIENTA PARA INTERPELAR LOS ENGRANAJES OCULTOS DEL CONSUMO, RESCATANDO LA BELLEZA INESPERADA DE LO DESCARTADO.